Mis peludos
Aquí estoy feliz rodeada de mis peludos. A pesar de nacer en la ciudad, tuve la gran suerte de disfrutar del pueblo rodeada de todo tipo de animales.
Si me encontraba alguno pachucho, acababa una temporadita en casa de mis abuelos- paciencia infinita la de mi madre y mi abuela. Por suerte, mi abuelo estaba de mi lado. Él me enseñó a disfrutar del campo y de los animales, a recorrer el pueblo en bici, y a tirar a botes y latas con la escopeta de perdigones.
Siempre quise ser veterinaria, pero por cosas de la vida, terminé trabajando con maquinitas en lugar de corazoncitos.
“Rubia” fue mi galga. La de amaneceres que vimos juntas, y lo que disfrutamos andando por el campo. La llevo en mi corazón.
Después rescaté a Nala, el logo de Publicidad Canina, y mi compañera de vida desde hace más de 13 años.